NACIONES UNIDAS (AP) — El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó el viernes por unanimidad una resolución destinada a identificar a los responsables de usar cloro y otras armas químicas en ataques en Siria que han matado y herido a un número cada vez mayor de civiles en los últimos dos años.
La resolución, negociada principalmente por Estados Unidos y Rusia, establece un cuerpo internacional de investigación que busca responsabilizar a quien corresponda por los ataques con armas químicas durante el conflicto sirio, ahora en su quinto año, para que los agresores sean llevados ante la justicia.
Un ataque de armas químicas en un suburbio de Damasco mató a cientos de civiles el 21 de agosto de 2013 y llevó al Consejo de Seguridad a exigir la destrucción de las armas químicas de Siria y el equipo utilizado para producirlas. Pero desde entonces se han presentado varios reportes de que continúa su uso en Siria, sobre todo bombas de barril llenas de cloro.
El gobierno sirio niega haber usado armas químicas, y lo reiteró el embajador de Siria ante la ONU Bashar Ja'afari, quien culpa a grupos terroristas.
Pero Estados Unidos y otras naciones occidentales sostienen que el gobierno es el culpable, sobre todo por las bombas de barril y otros agentes tóxicos lanzados desde helicópteros ya que la oposición no cuenta con aeronaves.
"Señala a alguien importa", dijo la embajadora estadounidense en la ONU Samantha Power. "Esto envía un mensaje claro y poderoso para todos aquellos involucrados en los ataques de armas químicas en Siria de que el (nuevo cuerpo de investigación) te identificará si atacas a gente con gas".
Pero agregó que procesar a los agresores les tomará tiempo porque no existe un tribunal para investigar los supuestos crímenes durante la guerra en Siria, que ha matado a por lo menos 250.000 personas desde que comenzó en marzo de 2011, de acuerdo a la ONU.
Aunque Rusia y Estados Unidos no han logrado ponerse de acuerdo sobre la manera de poner fin al conflicto sirio, sí pactaron que se eliminen las armas químicas del país. El voto en el Consejo de Seguridad se produjo dos días después de que el secretario de Estado, John Kerry, y el canciller ruso, Serguei Lavrov, llegaran a un acuerdo sobre el texto final